LEVANTANDO MI AUTOESTIMA LUEGO DE UNA RUPTURA AMOROSA

“Estaba muy encantada con mi nuevo novio, sentía esas sensaciones extrañas que solemos experimentar cuando nos gusta un chico e iniciamos una relación. El noviazgo se fue solidificando y las emociones se fueron intensificando mutuamente.

Nos entendíamos muy bien, teníamos muchos gustos similares,  viajamos juntos y salimos siempre a explorar nuevos sitios. Por alguna razón a mi hermano y a mi padre nunca les agradó mi novio del todo,  de alguna forma ellos sabían desde el inicio que él no era para mí. Pero yo me sentía muy  cómoda con él,  pensé que  nuestra relación iba a durar muchos años como las de todas mis amigas, pero fue en nuestro décimo mes cuando todo cambió repentinamente, él comenzó a mostrarse diferente, fueron dos semanas de extraño comportamiento, ya no era especial, no me deseaba sexualmente como antes, era indiferente a todos mis comentarios, estábamos juntos e ignoraba que estaba a su lado, era como si le molestara mi presencia.

Ya no me escuchaba ni le importaba nada de mi vida, me hacía sentir despreciada y hacía comentarios ofensivos acerca de mi físico. Comencé a sentirme muy mal conmigo misma, no me sentía bonita, me sentía rechazada, despreciada, poco valorada  y el detonante fue cuando de un momento a otro me dijo “démonos un tiempo” ya no quiero seguir con esto, hace un tiempo que no me siento cómodo contigo como al principio de la relación. 

Fue un balde de agua fría, no me lo esperaba, todo paso tan rápido en tan corto tiempo, pero sabía que algo no andaba bien, sentía que había conocido a alguien más, meses después fueron confirmados.” Esta fue la historia de Juliana.

Como le pasó a Juliana, a muchas de nosotras nos ha pasado, nos han dejado, nos han rechazado, nos han hecho sentir despreciadas, quedamos con una pequeña sensación de “venganza” y nos decimos a nosotras mismas: Solo espero que se arrepienta de haberme dejado,  solo espero que no sea feliz con otra mujer. Son los pensamientos de rabia que generalmente deliberamos hacia nuestro ex.

Pero lo que sucede después de una mala ruptura amorosa es lo tedioso, es recuperarnos y no seguir cargando con ese sentimiento de desamor, es volver a recobrar un estado de tranquilad interna, volver a creer que hay un hombre que sí desea estar con nosotras,  y confiar que lo vivido fue para aprender de la relación y de él.

Así que tomamos de motivación la ruptura y empezamos a salir más seguido, ir al gym, clases de yoga, clases de baile, viajar, buscamos actividades que nos ocupen la mente, intentamos salir con otro hombre, pero en el fondo estamos buscando actividades en donde logremos sentirnos hermosas de nuevo y sentirnos seguras de nosotras para volver a recuperar esa autoestima que permitimos se nos perdiera por no estar alimentándola diariamente, por pensar erróneamente acerca de nosotras  y a veces tomamos una reacción errónea frente al desamor, lo convertimos en una tragedia fatalista porque nos duele, pero es vital para nuestro ser, no perder nuestro amor propio y evita por ejemplo los siguientes  pensamientos, que nos destruyen internamente:

• Ningún otro hombre nos amará porque no valemos
• Vamos a estar solas porque nos aterra la soledad
• No somos merecedoras de ser amadas
• Compararnos con otras mujeres y creernos inferiores
• No somos hermosas para estar con alguien
• El amor no existe

Somos fatalistas acerca de los hombres, llegamos a verlos como nuestros enemigos, pero no lo son, no podemos estigmatizar a todos  por el comportamiento de unos. Nos volvemos pesimistas acerca de tener una buena relación. Y uno de los errores que cometemos es empezar a buscar desesperadamente otro hombre para ocupar ese vacío que nos deja  nuestro ex y no darle el debido duelo a los sentimientos negativos.  Esto hace que volvamos a repetir la misma historia una y otra vez sin reflexionar sobre el porqué de lo vivido y afectamos nuevamente nuestra autoestima al tomar decisiones por miedo a la soledad, por venganza, por no creer en lo que podemos lograr y nos conformamos con lo primero que se nos aparezca para cubrir esos miedos.

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Maltratamos nuestra dignidad al desmeritar  el  ser humano especial que somos y debemos entender que el desamor es una experiencia de vida a la que no hay que temerle y de la cual no estamos excentos. No hay que dejarle que se quede por años en forma de sufrimiento, dolor y amargura.  Recuerda que nada es para siempre en esta vida, todo es prestado y solo debemos amar nuestra vida, nuestra familia, nuestros amigos, nuestro trabajo, nuestra pareja mientras la tengamos y no arrepentirnos de dar lo mejor de nosotras a los demás, haciéndolo dejamos huella y eso hace que seamos irremplazables, y tranquila los ex siempre vuelven tarde o temprano, así que en algún momento vas a tener ese sentimiento de satisfacción pero ya cuando vuelva no te importará porque lo habrás superado y habrás entendido que en verdad no era para ti.

Y confiarás en que grandes cosas esperan por ti y que hay un hombre en este planeta tierra que estará dispuesto a amarte como tú deseas, pero ¡OJO! Lo más importante es que sepas que tu amor por ti vale mucho más y que una pareja es para compartir un viaje hermoso en este mundo terrenal.

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Aura
Spicy Grape Team