ERRORES COMUNES QUE FÁCILMENTE ACABAN CON RELACIONES DE MUCHOS AÑOS

Llegué a mi apartamento luego de mi larga jornada laboral y todo lo veía vacío, me costaba creer mi realidad, me costaba creer que ya no volvería a estar con el hombre con quien proyecté casarme, tener hijos y envejecer.

El silencio reinaba en mi apartamento y las lágrimas ni siquiera podían salir de lo desconcertada que estaba.

Me rehúso a sacarlo de mi cabeza.

Antonio era el hombre de mi vida, era el hombre que conocía cada centímetro dentro de mi cuerpo, era mi mejor amigo, todo lo mío lo sabía, todo se lo contaba, era mi apoyo en cada dura situación y mi alegría en los momentos felices. Él era mi complemento de vida.

Al acabar la relación con él, sentí que parte de mí se murió. Me pregunto cómo fue que esto pasó. Sentía que el mundo se me venía encima y que me quedaría sola para siempre.

No concebía la idea de estar sin él y mucho menos de compartir mi vida con otra persona.

Hice de Antonio mi vida, centré todo en él, me alejé de mis amigos por solo compartir con él, me fui a vivir a otra ciudad por estar con él, lejos de mi familia, pero con la satisfacción de tenerlo a él junto a mí, cuando de repente todo se me vino encima, mi relación se acabó, se fueron a la basura los años de lucha y sacrificio.

Antonio, llegó una noche al apartamento y quería que habláramos de nosotros, pensé todo menos que ese día fuera a terminar con tantos años de noviazgo. Me dijo que ya no sentía lo mismo por mí, que me tenía mucho cariño y aprecio, pero ya no lograba verme como a una pareja.

No se sentía atraído sexualmente y no estaba disfrutando estar conmigo como lo hacía antes. Me dijo que sintió que cayó en una monotonía deprimente y que su interés murió.

Yo dejé de arreglarme porque casi no salíamos, decía sí a todos sus planes y no le proponía ninguno. Como vivíamos lejos de nuestras familias, lo viajes siempre eran a visitarlos, nunca hacíamos un viaje para los dos. Caímos en una vida plana que yo veía absolutamente normal.

Fue fácil para todos decirme: ¡ya olvídalo! Pero solo yo entendía cómo me sentía en ese momento y cómo quería hasta morirme.

Esta la historia de Natalia, ¿Cuáles fueron los PRINCIPALES ERRORES que cometió en su relación?

• Creó una dependencia en todas las actividades diarias con su pareja.
• Dejó de ser creativa y no proponía planes nuevos en su relación.
• Dejó de salir con sus amigos y dejó de crear experiencias individuales.
• Se olvidó de sus metas y sueños y se entregó enfermizamente a la relación.
• Permitió que se redujeran los encuentros sexuales y que apagara la llama erótica.

 

No tenemos que esperar a tener una ruptura para darnos cuenta de los errores en nuestra relación.

Una práctica fácil que podamos aplicar en una relación, es hacer una introspección personal y compartida con nuestra pareja sobre aquellas situaciones que nos generan vacío o inconformismo, y más importante aún sobre lo que nos genera placer y satisfacción.

CREA UN CANAL DE COMUNICACIÓN CON TU PAREJA.

Parte de tu responsabilidad es crear un medio en el cual puedas comunicarte asertivamente con tu pareja para expresar tus deseos y molestias.

 

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Julie G
Spicy Grape Team